Importancia y Proyección de la Amistad en el MCC

Buenos días, amigos. Qué oportunidad tan grande que Dios y ustedes me dan para comunicar mi opinión, pero sobre todo de mi vida en el MCC. De mi vivencia en la vida en la Cristiandad en Acción.

Ya nos hablaron de la Amistad, que es el mejor medio de nuestros amados Cursillos para comunicar “que Dios nos ama”.

A mi me toca hablar como integramos la amistad en todo el MCC. Recordando siempre que la amistad es la manera o el medio base de nuestro movimiento. Si en todo lo que hacemos dentro del movimiento no hay amistad estamos fallando en algo.

Haciendo un sobre vuelo en el Precursillo les puedo recordar que todo se facilitará más y con mejores frutos si tenemos una actitud amistosa. Recordemos también lo que Eduardo decía: “Fieles al evangelio, atento a las personas y abiertos a las realidades”. Nuestra unión vital al Evangelio de Cristo es lo que hace el cambio en nuestras relaciones interpersonales. Nos hace también estar atentos, sensibles, preocupados por las personas. Les pregunto ahora ¿cuáles son las realidades de nuestros ambientes? Así como el mundo cambió en unas decenas de años en la tecnología y otras ciencias, el ser humano no se podía quedarse atrás. La persona que vivía en el tiempo del primer cursillo de la historia en 1944 es la misma persona, pero se ha adaptado al mundo moderno. El único problema fue que se está olvidando de Dios. Se ha olvidado de algo que nosotros redescubrimos cuando vivimos nuestro Cursillo. Por ende, ahora nuestra actitud frente a esta nueva manera de actuar de la persona debe de ser de acuerdo con cada una. El mejor medio para comunicar la Buena Nueva es la amistad independientemente de su circunstancia. Es la persona que recibe el mensaje.

Ahora veamos el Cursillo. Comencemos por “el equipo de dirigentes”, así lo llamamos nosotros en Canadá, antes del fin de semana nos reunimos varias veces. En necesario aquí aclarar que no nos reunimos para estudiar lo que en el Cursillo sucederá. Cierto es que revisamos las tareas de cada uno y el desarrollo durante los 3 días, pero la razón importante es la fusión del equipo en un solo bloque. Es necesario llegar al Cursillo siendo un solo cuerpo de servicio para que los participantes digan sorprendidos: ¡“como se aman”!. Somos un grupo de servicio amigos, que nos admiramos, nos queremos y rezamos los unos por los otros. A propósito de la amistad en los rollos se menciona en todos los rollos. Por ejemplo, la amistad con Dios, “ya no los llamo siervos sino amigos”. Se nos dice que debemos hacer amigos, hacernos amigos para hacerlos amigos de Cristo. Se nos pide de hacer el camino en compañía. Se nos propone hacer un estudio del ambiente para identificar el grado de relación con Dios que tienen las personas en nuestros ambientes, no por juzgarlos, sino que para saber como iniciar una amistad o por lo menos una relación cordial con todos.

Al final sucede algo previsto. Los participantes al Cursillo ya no están solo con su presentador o padrino, sino que también tienen más amigos, el equipo de dirigentes y la Cristiandad en Acción, que es nuestro movimiento. Todos les ayudaremos a caminar en su 4to. Día. Haremos lo que hizo Ananías con Saulo de Tarso, después que éste tuvo su encuentro con el Señor. Leamos los Hechos de los Apóstoles y comprobaremos como lo trató y lo ayudó a comenzar a caminar. Importante, temeroso Ananías de recibirlo en su casa por sus antecedentes, pero confiado en el Señor que le daba un trabajito. Lo mismo nos puede pasar ahora a nosotros con los alejados. Confiémonos en el Señor que nos llama y tratémoslos con mucho cariño y preocupación sin olvidarnos que eran alejados, pero que han tenido su encuentro con el Señor, como todos nosotros.

Quiero tomar más tiempo para hablarles de la Reunión de Grupo, por medio del cual podemos hacer perenne nuestro Cursillo y donde vivimos y hacemos crecer y elevar nuestra amistad entre los amigos a un nivel sobre natural. También, sin olvidar de la Ultreya, que en teoría es la reunión de Reuniones de Grupo.

Con todo lo anteriormente dicho voy a compartirles como nos puede ayudar o afectar nuestra vivencia y convivencia de lo fundamental cristiano en nuestros movimientos. ¡Como en realidad podemos llegar a decir que: “La vida es bonita, la gente es importante y vale la pena vivir”!

Digo y repito, como nos puede ayudar o afectar si no vivimos la Amistad entre nosotros. Recordemos que tres son los pilares que mantienen la mentalidad de Cursillos: Cristo, Persona y Amistad. Van creando un criterio y como efecto, un nuevo estilo de vida. Entonces ser amigo con todos, es algo esencial dentro de nuestro movimiento. Claro está que existen diferentes grados de amistad.

Por ejemplo: la amistad entre los miembros de nuestra Reunión de Grupo será de hermanos, en grado íntimo. A la cual están asociados valores fundamentales como el amor, la lealtad, la solidaridad, la incondicionalidad, la sinceridad y el compromiso que lo comprendemos como “meterme con”, y que se cultiva con el trato asiduo y el interés recíproco a lo largo del tiempo.

Con los miembros de la comunidad, será fraterna, pero no con la misma intimidad, pero donde se vive también el respeto, el afecto, la simpatía y la confianza.

Todas las actividades que realizamos deben de favorecer en nosotros el ser más amigos.

“La única manera de tener un amigo es ser un amigo”, decía Eduardo. Tener una actitud amistosa con todos. No se nos pide ser amigos, pegapega. Lo que se nos pide es vernos con cariño, admirarnos y tener la capacidad de decirnos las cosas con caridad. Como decía San Agustín: “No hay amistad verdadera sino entre aquellos a quienes Tu aglutinas entre si por medio de la caridad”.

A través de todos estos años de vivir mi vida como cursillista he vivido y visto de todo. Puedo decirles que sin amistad entre nosotros no se avanza mucho. Podemos realizar muchas actividades que comienzan y terminan a una hora. Se participa en dichos eventos, pero nada nos une. Como decía alguien: vamos al “Cumplo y miento”.

Muchos no sienten ninguna pertenencia al movimiento. Aquí quisiera compartir algo que nos comentó Techy Neira, de Perú, en su rollo “Sentido de Pertenencia”. Dice el diccionario: “Sentido de pertenencia, es un sentimiento de vinculación o dependencia que experimenta un miembro de una sociedad. Se manifiesta por una simpatía y una inclinación recíproca entre los individuos que integran una comunidad”.

Es la satisfacción que tiene una persona al sentirse parte integrante de un grupo, una asociación... un Movimiento.

Este sentido de pertenencia nos lleva a creer, cuidar, defender las cosas que nos pertenecen o a lo que sentimos pertenecemos. Somos custodios, administradores, guardianes de nuestro movimiento cuando sentimos que pertenecemos a él. Si no tenemos este sentimiento de pertenencia el movimiento puede continuar o puede desaparecer y a nosotros no nos afectará.

Esto se manifiesta en la participación. Supongo que participan porque se han hecho una rutina y no la quieren romper. Todos nos hemos dado cuenta que cuando alguien así, deja de participar ya no regresa porque ha roto la rutina.

Como pretexto usan a veces y solo esperan una mala mirada, alguien le contradijo en algún comentario, etc. Esto se da por la falta de la vivencia de nuestro trípode, piedad, estudio y acción. Nuestra vida cristiana no está equilibrada y por eso nos volvemos personas susceptibles. Con una susceptibilidad a flor de piel que no llegamos a sentir la pertenencia a nuestro movimiento. Movimiento que nos ha permitido tener y vivir el encuentro con Cristo. Movimiento que nos permitió por medio de este encuentro la liberación de la esclavitud del pecado o por lo menos el inicio de nuestra conversión.

Desde que viví mi Cursillo hace ya muchos años, me impactó tanto el encuentro con el Señor, conmigo mismo y con los demás que desde ese momento no me he separado del movimiento. Han pasado muchas cosas en mi vida y en la vida del movimiento en mi diócesis que me hubieran hecho retirarme, pero estoy consciente y muy consciente que este es el camino donde el Señor me ha puesto para peregrinar junto a ustedes de regreso a la Casa del Padre.

Hace poco escuché esto que me llamó mucho la atención y tiene mucho sentido: “El contacto con los mejores me mejora. Estando consciente que muchos mejorarían, si yo mejorara”. En otros lados también nos sugieren: “péguese a los ganadores”. Es muy interesante hacer el camino en compañía. Claro está que no es fácil. En todas las relaciones interpersonales siempre es necesario hacer concesiones. En otras palabras, a veces es necesario ceder, a veces también es bueno afirmar lo que uno piensa, pero siempre con caridad. San Agustín nos dice: “ama y has lo que quieras”.

Pensando en todo esto encontré dos palabras casi iguales, con una letra de diferencia, actitud y aptitud. Pero que hacen mucha diferencia cuando nos vamos integrando al movimiento y después cuando deseamos permanecer en él. Según el diccionario: “Mientras que la actitud se refiere a un rasgo de la personalidad humana y su forma de reaccionar frente a los problemas, la aptitud se refiere más a la capacidad de un empleado para cumplir una función y un rol específico”.

Nuestra actitud frente a las situaciones de la vida y específicamente en la vida del movimiento depende mucho. Cuando recién inicié mi vida dentro de Cursillos no fue fácil porque mi actitud era la de un alejado. Con una personalidad muy posesiva, autoritaria, egoísta, etc. Por esta razón mi integración fue difícil, pero yo estaba agradecido con el Señor que me había recibido con los brazos abiertos y me había perdonado de todas mis miserias. Estoy seguro que la misericordia del Señor fue forjando una actitud cristiana ante todo esto nuevo para mi. Por ende, fue dándome una aptitud cristiana que sigue creciendo y afianzando con la amistad de todos ustedes. He tenido varios cargos de servicio que los he cumplido siempre con un espíritu de servicio. Convencido siempre que todo lo que hago es para engrandecer el Reino de Dios y nunca para servirme, para ponerme por encima de todos.

Por esto hay algo que siempre me ha ayudado a hacer el camino en compañía: “Si quieres llegar rápido, camina solo. Si quieres llegar lejos, camina en compañía de otros”.

Otra de las razones que no hacen muy fuertes los lazos de nuestra pertenencia es la falta de las Reuniones de Grupo entre los miembros. Hay movimientos que en más del 50% de sus miembros no tienen Reunión de Grupo. Muchas veces se consideran las Reuniones de Grupo de la Ultreya como Reunión del Grupo a nivel íntimo y olvidan que a parte es la Reunión de Grupo con quien quieres y la Reunión de Grupo con quien debes. La Reunión del Grupo con quien quieres nos permite compartir nuestra vida en un nivel íntimo. La reunión del grupo en la Ultreya nos permite compartir la vida con otros que al mismo tiempo vamos conociendo más. Este conocimiento entre los miembros de nuestra Ultreya nos permite ir amándonos más. Recordemos el eslogan que dice “más te conozco más te quiero”.

La falta de Reuniones de Grupo con quien quieres se puede observar en muchos movimientos de Cursillos alrededor del mundo. Muchas veces por desconocimiento del método y otras veces por comodidad. Es importantísimo comprender que la reunión de grupo con quien quieres no es una actividad más durante la semana. Es una gracia actual el reunirnos alrededor de Cristo y compartir nuestra vida a nivel íntimo.

Reunión de Grupo

Analicemos el título Reunión de Grupo y para eso separaré en dos palabras el título. Reunión: es un momento en el tiempo y el espacio. Grupo: es el número de personas que lo constituyen. El grupo permanece siempre por medio del rezar los unos por los otros, por medio de las redes sociales que existe hoy en día. No termina después de la oración final en la reunión. Nunca se disuelve, a excepción de razones mayores. Estando todos seguros que los que se separan del Grupo se integren en otro.

En el Cursillo se santifica la persona por su encuentro personal con el Señor y su Gracia. En la Reunión de Grupo, se pretende situarla en una circunstancia...

Estable,
Dinámica,
Santificante y
Libre,

...de modo que la persona no se encuentre total y desoladamente “en tierra extraña”.

Definición

En la Reunión de Grupo el Cursillo se hace perenne y el cristianismo se hace constante. Todo lo que se vive en cristiano debe convivirse. Es un cauce para convivir el cristianismo que cada uno vive o intenta vivir.

La forma más profunda de convivencia es la amistad. Por ello la Reunión de Grupo es la amistad llevada al terreno de lo Trascendente o Sobrenatural: la amistad convertida en una gracia actual permanente.

Bien decía Eduardo Bonnín, que “No hay reuniones de grupo para que haya Cursillos, sino que se hacen Cursillos para que haya gente que viva en clima de Reunión de Grupo”, es ahí precisamente en donde se conoce, se vive y prevalece la amistad sincera y verdadera. Después que se ha tenido experiencia de la amistad no se anhela más que una cosa: crecer en la amistad. Y que el Cursillo es tan sólo el mejor medio que conocemos para proponer y disponer a los cursillistas para empezar a hacer Reunión de Grupo.

No es la Reunión de Grupo un simple medio de perseverancia, porque el que no la hiciera también perseveraría. Esencialmente, hace parte del dogma de la Comunión de los Santos. Todo Cristiano comparte lo que vive cristianamente. Esta convivencia entre cristianos se eleva al terreno de lo sobrenatural.

Por tanto, tiene que considerarse la Reunión de Grupo como algo que se vive a nivel espiritual. No es una actividad más en nuestras vidas. Igualmente, que en el Cursillo nos pidieron ilusión, entrega y espíritu de caridad.

Como dice alguien: “En la Reunión de Grupo me siento ola y en la Ultreya nos sentimos mar”.

Motivación

Queridos amigos, el movimiento será lo que sus dirigentes sean. Hagamos un examen de consciencia y veámonos que actitud tengo ante las situaciones que se me presentan en nuestra vida de Cursillistas. Eduardo decía que el cristiano no se le mide por las acciones, sino por las reacciones que tenemos ante los problemas. Deseo que este Nuevo Año 2021 sea un año para ver las cosas de siempre con ojos nuevos y que crezcamos en amistad. Esta amistad que vaya siendo cada día más sincera. Que descubramos dentro de nuestras Ultreyas, por el momento virtuales, las personas con las que podremos hacer Reunión de Grupo con los que quiero. A las Ultreyas llevemos la vida para compartir a los más posibles.

Esta pandemia nos ha permitido descubrir nuevas maneras para conocernos, para enriquecernos e ir afirmando más nuestras convicciones y podamos ir viviendo esta parte de la definición de Eduardo que dice: "Vaya tomando interés en emplear su libertad para hacerlas convicción, voluntad para hacerlas decisión y firmeza para realizarlas con constancia en su cotidiano vivir personal y comunitario".

CONCLUSIÓN

Mantengámonos unidos y viviendo los ideales Evangélicos. Reavivándolos y sobre todo renovándolos a la luz de la Fe, Esperanza y Caridad. “Ya no los llamo siervos sino amigos”, nos dice el Señor y nos deberíamos decir entre nosotros. Recordemos que entre nosotros debería sentirse el clima de amistad. De esta manera los demás podrán decir “vean como se aman”. La fidelidad a Cristo nuestro dirigente y modelo que lo conocemos más en el Evangelio. El respeto a la Persona, por persona y nunca por su circunstancia y finalmente la Amistad con Dios y entre nosotros.

De Colores
Carlos Muñoz
09012021