Eduardo define así:

"El Cursillo de Cristiandad es un movimiento que, mediante un método propio, intenta, y por la gracia de Dios, trata de conseguir que las realidades esenciales de lo cristiano, se hagan vida en la singularidad, en la originalidad y en la creatividad de la persona, para que descubriendo sus potencialidades y aceptando sus limitaciones, vaya tomando interés en emplear su libertad para hacerlas convicción, voluntad para hacerlas decisión y firmeza para realizarlas con constancia en su cotidiano vivir personal y comunitario".

“Estructuras: Retos y Oportunidades”

“El Carisma Fundacional a la luz de los medios de comunicación”

“Enseñanzas que da el confinamiento al Cristiano Cursillista”

"El paso de la Norma al Criterio", rollo a cargo de Toni Oliver.

"Clericalismo". Rollo a cargo del Pbro. Guillermo Marcelo Abrey.

"Diálogo con Antonio "Toño" Punyed de El Salvador"

Tertulia de amigos, conociendo más a Eduardo, con los amigos de Mallorca.

Recorriendo la milla, andares de un cursillista por Angel Delgado, Florida, EE.UU.

Pensando y caminando en Cursillos por Leila Hamuy, Argentina

El estudio del ambiente a la luz de la realidad virtual por Carlos Muñoz, Canadá

Sacerdocio y seglaridad: creciendo juntos por P. Ezio Succa, Italia

Eduardo, un hombre hecho de cielo y barro por Efisio Pilloni, Italia

Rollo Inicial por Marco Antonio (Toty) Valdez, México

Testamento Espiritual del Fundador de Cursillos de Cristiandad

Sabíamos, y gracias a Dios nunca lo hemos olvidado, a lo que íbamos y lo que queríamos conseguir. Teníamos claro lo que gracias a Dios nunca se nos ha oscurecido: que el Evangelio es verdad y que, realizado en la vida y metido en el corazón y en la inteligencia de cada persona que cree en Cristo y se abre de verdad a su Verdad, correspondiendo a su gracia, tiene una potencia arrolladora capaz de entusiasmar a los más remisos.
En Cursillos se trata de presentar la Verdad de Cristo escueta, acentuando lo más importante que es su Resurrección, el descubrir que nos ama a cada uno en particular y personalmente y que está presente cuando dos o más se reúnen en su Nombre.

El Cristianismo

No es una doctrina que se tiene que saber, es una realidad que se tiene que vivir en conexión viva con la vida misma, desde lo que la vida es, interiorizando las realidades que más apuntan al vértice de lo cristiano, para ir encarnándolas en lo cotidiano. Tratando de comprender y asimilar que el Evangelio, no es la simple opción por la virtud, sino intentar, con honradez ejercer siempre la virtud de optar por Cristo y por el hombre.
Dios en Cristo nos ama. Dios me ama a mí
Ser cristiano, más que otra cosa, es sentirse amado por Dios, y vivir asombrándose de ello, ya que lo más genuinamente cristiano es dejarse amar por Dios.
(Eduardo Bonnìn Aguilò)

Cursillistas Hispanos de Canadá

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