Último adiós a César Dávila

Reflexión sobre Don César                         

Hay mucho mas consternación en el mensaje que nos dejo Don César  que en su misma muerte casi súbita.
Al  entrar al funeral de Don César, la tristeza y ganas de llorar no se hacían esperar. Era claro que el fin de aquella sonrisa complaciente que siempre veíamos en él y que se quedará por siempre grabada en nuestras memorias. Allí estaba Don César, el  mismo de siempre, muy  formal  y adecuado. Ahora solo estaba plácidamente dormido en los brazos de Dios, pues en el cielo no se necesita sonreír porque  aquí la sonrisa es momentánea y  allá la alegría es eterna.
Pero entre silencio y silencio frente  al féretro descubro  que Don César nos dejo un gran mensaje que tal vez paso desapercibido cuando él andaba entre nosotros: Es con nuestra actitud individual que podemos hacer comunidad. Es rompiendo barreras de idiomas y culturas y dejando nuestra hermandad ser que en realidad podemos ser todos uno.
Anoche, en su funeral, pude comprobar que Don Cesar, con su actitud verdaderamente cristiana, se hizo hermano de todos. Gente de las comunidades de habla inglesa, italiana  e hispana se hicieron una sola comunidad presente para ofrecer sus condolencias y rezar juntos. Don Cesar logró con sencillez lo que parecía un gran reto.
Esa combinación de humildad y gracia en el trato con todos fue determinante, además de esa alegría en el servicio. Eso era lo que su sonrisa transmitía. La pregunta que no se hacía esperar: que paso que no prestamos más atención a ese mensaje que Dios nos estaba enviando por medio de alguien tan excepcional? Ahora tal vez no es tan tarde para nosotros para absorber el mensaje, pero para Don Cesar se llego la hora, el 5^to día, como dicen nuestros hermanos cursillistas. Creo que con su vocación al servicio aceleró las horas de servicio que Dios le había asignado en la tierra. Ahora es hora de servir en el cielo. Que el Señor le de la vida eterna, que nos ayude a ser todos uno y que le de consolación a su familia y amigos.

Una oración para recordar a César Dávila

 (de la Liga de Mujeres Católicas de la Parroquia San Felipe Neri)

Dios recordamos a y oramos por todos aquellos que han fallecido, especialmente por nuestro amigo César

Recordamos y oramos por su familia.

Consuélales y fortaléceles en su fe en Ti

También oramos para que Tú estés con nosotros

y nos consueles  y nos fortalezcas en nuestra fe en Ti

Que podamos ser un apoyo a la familia de Cesar y de unos a otros.

Te lo pedimos en el nombre de Nuestro Señor Jesús

Quien Es la Resurrección y la Vida.

Amen.