Buenos días amigos todos,
Estos días son muy significativos para toda la comunidad cursillista ya que se esta celebrando el aniversario del nacimiento de Eduardo Bonnin Aguiló, quien como todos sabemos, fue el fundador de los Cursillos de Cristiandad. Por esta razón, he querido compartir con todos la especial dedicatoria que escribí para mi libro, UNA VERDAD DESCUBIERTA DESDE EL “ASOMBRO DE DIOS” ya que en ella se encierra todo lo que "se" hemos realmente descubierto los que tuvimos el regalo mas grande, el de encontrarnos con ese Jesús vivo, real y cercano.
Gracias Eduardo, por haber dicho "Si" y compartir este Carisma tan grande.
Especial dedicación
Este libro está dedicado a todos aquellos hombres y mujeres que descubrieron que todo es más lindo cuando lo miramos a través de los ojos de Cristo y luchan cada día y a cada momento por lograr que el “Asombro de Dios” esté presente en toda su vida.
También está dirigido a toda la “Comunidad Cursillista del ayer, del hoy y del mañana”. No existe lugar en el mundo en donde nosotros, los cristianos cursillistas, no lleguemos, pues nuestro Carisma Fundacional, cuando se es bien entendido, y sobre todo realmente vivido, nos mueve al ir en busca de la “persona” que se encuentra alejada del Señor. Somos nosotros, con nuestras decisiones y acciones los que contagiamos nuestros ambientes del olor más rico que pueda existir, “el olor a Cristo Jesús.”
Estas páginas, según se han ido escribiendo, han ido revelando una verdad “que no necesita flotadores,” como decía siempre nuestro fundador, Eduardo Bonnín y al mismo tiempo, espero, vuelen al cielo para dejarle saber a Cristo Jesús, que lo que fue depositado en la mente y el corazón, de su hijo Eduardo, ha fluido, se ha esparcido, se ha contagiado, y lo ha compartido con cada una de las personas que estuvieron a su lado desde el principio, cuando el Espíritu Santo le puso este carisma en sus benditas manos.
El Carisma Fundacional de este movimiento de Cursillos, ha dado muchos y muy buenos frutos porque siempre contó con el Espíritu Santo de Dios y la humildad indiscutible de Eduardo Bonnín Aguiló, quien dijo “Sí” aun cuando los obstáculos iban surgiendo mientras caminaba, y el sufrimiento lo hacía sufrir la oscuridad del silencio desde lo más hondo de su ser.
A ti amigo mío, a quien no tuve la dicha de conocer personalmente, va dedicado todo lo que en este libro se dice, se expone, se denuncia y también se anuncia. A ti Amigo mío, quien entendió su misión y a quien no le pudieron acallar su verdad, la verdad del Evangelio, la verdad del descubrirse persona y lograr que muchos también nos hayamos descubierto personas, dignas y amadas de nuestro Creador.
A ti “Amigo de todos” pues siempre lograste hacer sentir al que estaba a tu lado importante, amado y escuchado. A ti Eduardo, de quien entendí, que el mejor título a lo que se puede aspirar es “al título de Bautizado.”
¡Ultreya y DE COLORES - amigo que estás ya en el cielo!
Janire Pagán
Fort Myers Fl,